Matias Passalacqua Alonso
26 años.
Entretenimiento y el espectáculo.
Contacto:
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Trabajar en un circo significa más que ser artista abajo de una lona, es una forma de vida muy compleja, tanto qué, es necesario transformar paradigmas para disfrutarlo. A mi me enseñó a vivir de otra manera, fué una experiencia que me marcó para siempre. Yo soy cirquero, porque no puedo cambiarlo, ya está. Te acostumbras a trabajar, a acostarte tarde y levantarte temprano, a ordenar, a ensayar, a viajar, a comer bien, a hacer reir, a caerte, a soportar el dolor, a sonreir, a caminar, a trepar, a perderle el miedo a la altura, a especular, a negociar, a pedir el aplauso, a llamar al silencio, a entretener, a hablar con la gente, a cortar las tormentas, a jugar bien al truco, a ser solidario, a vender, a venderte, a manejar energías masivas de mas de 200 personas y a estar bañado y perfumado para llevar todo eso a cabo. Por eso, es imposible describir lo que es el circo para mi, en pocas palabras.."
En la actualidad, desarrollo una actividad comercial, que tiene que ver con el entretenimiento y el espectáculo. En su mayor proporción, son espectáculos circenses. Ofrecemos Circo en las escuelas del gran Buenos Aires, mayormente en zona sur. Por otra parte, nos destacamos como animadores de eventos y ofrecemos shows para los mismos, que poco tienen que ver con el circo per se (Aunque siempre usamos la expresión "mirá el circo que armamos!".). En definitiva, vivo del circo y de sus enseñanzas, pero no dentro de él.
Y me gustaria decir que el circo argentino, con mas de sus 120 años, debería ser declarado Patrimonio Cultural de la Argentina.
